El Shii-Cho esta especializado en luchar contra múltiples oponentes; gracias a sus amplios movimientos de barrido, es ideal para atacar a numerosos adversarios al mismo tiempo. Sin embargo, no es tan útil contra oponentes individuales, ya que tales enemigos tienen movilidad completa y pueden adaptarse a la ejecución del practicante para atacar allí donde sea más débil.
La Forma I, apenas requiere explicación, ya que cada iniciado Jedi aprende los fundamentos de ataque, defensa, blancos corporales y ejercicios de práctica llamados velocidades.
Al ser la forma más simple, es la primera que se enseña a los iniciados en la Orden Jedi. El entrenamiento en la Forma I proporciona el conocimiento básico de los principios de lucha a espada y la desviación de fuego de blásters, habilidades que se requieren para la práctica de todas las demás formas.
Con el fin de enseñar a los estudiantes a aprovechar la Fuerza en lugar de confiar en sus sentidos, el nivel más sencillo de Shii-Cho para desviar el fuego de bláster se hace con los ojos vendados, lo que obliga al iniciado a confiar en sus instintos. Más tarde se alternaran patrones de secuencias y velocidades en el entrenamiento, desarrollando los movimientos del practicante como actos reflejos. Este régimen de entrenamiento se extrapola a todas las demás formas de combate con sables de luz.
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